viernes, 25 de enero de 2013

Dejar algo



Quizá la vida sea demasiado breve como para andar preocupándose por la muerte.

Y a mí me parece que hoy tiene sentido todo. A veces las cosas tienen sentido, rara vez.

Pero esto no va a durar.

La idea de que no va a durar,  ¿lo hace menos disfrutable o más? La idea de que esto es pasajero, ¿da más angustia o menos?

No hay eternidad mayor que la de este instante. No tenemos la capacidad para comprender la eternidad. Nos vamos a morir y todo va a seguir. No somos importantes en el devenir del universo.

Algunos de nosotros quedarán en la Historia, la mayoría no.

Yo quiero seguir siendo anónima. Pero dejar algo.

martes, 15 de enero de 2013

La felicidad es sólo otro nombre del olvido



La escena de la que hablaba de Waking Life (que su distribuidora FOX hace remover de YouTube) es esta que transcribí y puse en este post.


La cuestión del pico del petróleo y del Fin del Mundo, se explica en este video:



¿Cómo los niños que vienen luego que nosotros van a ser mejores que nosotros si somos nosotros los que les enseñamos a ser?

domingo, 13 de enero de 2013

Ahora

Imagen por karto gimeno


No hay tiempo. No hay tiempo para leer demasiado, no hay tiempo para escribir demasiado. No hay tiempo para contextualizar, para recapitular, para introducirnos en la historia del día con un poco de historia de ayer. Es todo hoy, ahora, en este momento, en vivo, en directo, en desarrollo. En este mismo instante tengo la impresión de que ya nadie va a leer lo que escribo y en este momento me dejo tentar por el divague, por las ramas del árbol de la palabra y digo AHORA, ahora que leés esto es ahora, ahora para siempre ahora, ahora que releo las líneas que escribí más arriba es ahora, pero ya no es ahora porque están escritas. Estamos tan en el ahora que nos perdemos en el tiempo. ¿Y si ya pasó todo y no nos dimos cuenta?

sábado, 5 de enero de 2013

Muros virtuales, vidas reales.






Recuerdos exhibidos en línea
memoria externa,
lo virtual real.
Documentamos, archivamos instantes,
que ya son pasado
y lo volveremos a ver.

El presente preso de instante definido
por el tiempo que tardamos en apretar un botón.
Apretar el botón de una cámara y ahí se congela y se resume el momento.
El momento se delinea entre lo que es y lo que deja huella.

Se publica para que sea visible a los otros.
cuántos más ojos lo vean, más real será.

La adicción de no poder parar de reafirmarse a cada comentario, a cada segundo.
La necesidad de uno mismo de hablar sobre uno mismo.

Los que escriben las paredes ajenas con su nombre están gritando un "aquí estoy yo".
Los que escriben en sus biografías de Facebook, antes muros virtuales, también.
Publicar un pensamiento se convierte en la afirmación de que existimos.
cuanto mayor sea la audiencia, mayor es la afirmación.
 Pasar sin pena ni gloria por la vida es como tener un blog que no lee nadie.

(Se puede jugar a ser periodista o artista sin haberse recibido de nada.)
 
Toda la historia de tu vida puede ser escrita para que te veas mejor de lo que sos.

Pero nadie va a publicar "hoy me drogué por primera vez", 
"hoy tuve sexo sin protección", 
"hoy me contagié herpes".
Nadie con cierto sentido de la privacidad. O, al menos, lo va publicar como "privado".

¿Cómo quisieras que te recordaran hoy? Escribilo en este espacio en blanco.

Mi biografía de facebook se ve mejor y más bonita que lo que es mi vida real. 
¿Les pasa a todos, no?